El pasado mes de octubre la serie celebró sus primeros 20 años de existencia y, aunque esto fue un motivo de felicidad entre los fans, ciertamente el festejo se vio afligido por el propio e irregular desempeño que ha seguido la franquicia. Microsoft, a sabiendas de que su IP aún cuenta con un enorme potencial que no ha sido aprovechado, decidió revivirla de un par de maneras: por un lado, desarrollando la más que aclamada cuarta entrega por la que muchos llevan esperando más de una década; y por el otro lanzando la Age of Empires: Definitive Edition, una versión remastarerizada del primer juego que inició con la saga.