Por más que creamos estar completamente acostumbrados, las franquicias con entregas anuales siempre darán de qué hablar, pues para la gran mayoría, tan sólo son pretextos de algunos publishers para vendernos lo mismo cada 365 días. A pesar de que hay algo de verdad en el argumento mencionado, tampoco me parece tan prudente poner en un mismo saco a todas las propuestas de este tipo, pues existen algunas que con cada lanzamiento, demuestran un claro avance de sus desarrolladores en todo sentido. Desde hace dos o tres años, los juegos oficiales de la Fórmula 1 podrían ser tomados como ejemplo de lo anterior, pues han tenido un crecimiento verdaderamente marcado en cada uno de sus apartados. F1 2017 llega con la misión de llenar algunos de los huecos dejados por su bien logrado antecesor, así como de introducir nuevas ideas a la serie.