El gobierno ruso, inmerso en una política pro-soberanía tecnológica, ha puesto en marcha esta semana una serie de pruebas destinadas a comprobar si su infraestructura nacional de Internet (conocida en Rusia bajo el nombre de RuNet) podría afrontar con éxito su 'desconexión' de la Internet global y de su sistema de DNS.
El experimento, en el que han colaborado no sólo las agencias gubernamentales rusas sino también proveedores de acceso y empresas tecnológicas del país, ha sido calificado por el gobierno de Putin como "un éxito", que ha logrado que -durante unas horas- RuNet se convirtiera en la mayor intranet del mundo.
¿Herramienta de censura, o método de autodefensa frente a los EE.UU.?
En palabras de Alexei Sokolov, subdirector del ministerio ruso de Desarrollo Digital, Comunicaciones y Medios de Comunicación,
"La conclusión es que, en términos generales, tanto autoridades como operadores de telecomunicaciones están listos para responder de manera efectiva a los posibles riesgos y amenazas, así como para garantizar el funcionamiento de Internet y de la red rusa de telecomunicaciones unificadas".
En Genbeta
Cómo sería navegar como lo hacemos pero desde Rusia
Eso sí, no se revelaron detalles técnicos en torno al planteamiento de la prueba más allá del dato de que se simularon varios escenarios de desconexión, Incluyendo uno que simulaba un cibertaque de una potencia extranjera.
Aunque hay quien compara el aislamiento de RuNet con el 'Gran Cortafuegos' chino, el discurso del Kremlin, más …