El Samsung Galaxy S25 Ultra es uno de esos teléfonos que hay que probar antes de juzgar. Sobre el papel, parece una evolución descafeinada del Galaxy S24 Ultra. Modelo que, a su vez, era una versión ligeramente más refinada del Galaxy S23 Ultra, el cual no era más que una versión mejorada del S22 Ultra...Pero la realidad es algo diferente. Es innegable que Samsung ha tomado la decisión de aprovecharse al máximo de una fórmula que parece haber dado resultado, construyendo un teléfono que apenas introduce novedades con respecto a las versiones previas, y limitándose a actualizar solo aquellos aspectos en los que puede quedar algo rezagada con respecto a la competencia, a la vez que hace de la inteligencia artificial el gran reclamo de su nuevo teléfono estrella.Este año, sin embargo, las mejoras van más allá de lo que aparece en su ficha técnica. El Galaxy S25 Ultra es mejor producto que el Galaxy S24 Ultra en básicamente todos los apartados. Incluso en aquellos que, aparentemente, se han mantenido intactos con el salto de generación. Cuenta con la mejor pantalla que hayamos visto en un teléfono hasta la fecha, un rendimiento impresionante, un sistema de cámaras increíblemente versátil y una longevidad garantizada gracias a los siete años de actualizaciones asegurados.Y pese a ello, también es el año en el que resulta más complicado justificar el apellido "Ultra". No porque Samsung haya hecho un mal trabajo, ni mucho menos. Sino porque la competencia ha subido tanto el nivel con sus …