Tras años de intentos fallidos, Samsung vuelve a disparar hacia el mercado del reloj inteligente con el Gear Sport, una propuesta más deportiva e informal que sus modelos previos. ¿Será suficiente para ascender puestos y plantar cara al Apple Watch de Apple?Cuatro años después de su primer reloj inteligente, Samsung sigue sin tracción en el sector.
El fabricante surcoreano comenzó la andadura en 2013, antes incluso que otros grandes fabricantes como Huawei o Apple. El primer modelo, llamado Galaxy Gear, atrajo multitud de miradas de todos los frentes, pero sus cifras de ventas y críticas posteriores fueron uniformemente negativas.
La situación no mejoró con el posterior Gear Live y el extravagante Gear S —aún sigo pensando qué pensaron en Samsung para lanzar ese modelo—. Ambos siguieron el camino de su primer modelo y cayeron en la máxima irrelevancia: críticas negativas, ventas escasas y fracaso absoluto.
[caption id="attachment_280019" align="aligncenter" width="670"] ¿Quién pensó en Samsung que esto era una buena idea?[/caption]
En 2015, afortunadamente, la cosa cambió parcialmente. Samsung desveló el Gear S2 y el S2 Classic en IFA, y con ellos formalizó un portfolio de smartwatches que, por primera vez, no olía a laboratorio de pruebas. Eran atractivos, tenían innovadores elementos tecnológicos y parecían ser una base suficientemente lo sólida como para construir una nueva y próspera gama de productos.
El siguiente eslabón de esta cadena tenía que ser, sí o sí, un hit, pero el Gear S3 acabó pasando sin pena ni gloria por un mercado que dominan indiscutiblemente los …