A pesar del auge de las redes 5G, la fibra óptica y el WiFi siguen siendo la base de la conectividad diaria, especialmente cuando se trata de trabajar, estudiar o ver contenido en alta definición. Por ello, lo más habitual es que cada hogar disponga hoy en día de al menos un router para garantizar una buena conexión en todo el espacio. Sin embargo, esa conexión no siempre va tan fluida como desearíamos. Las causas pueden ser diversas: desde un router mal ubicado hasta paredes demasiado gruesas o demasiados dispositivos conectados al mismo tiempo. Pero lo que no todo el mundo sabe es que uno de los factores que también puede entorpecer la velocidad del Wifi es la presencia de ciertos electrodomésticos cerca del router. Uno de los mayores enemigos del Wifi en casa es el microondas. Este aparato emite ondas electromagnéticas para calentar los alimentos, y lo hace en una frecuencia muy similar a la de muchas redes Wifi, especialmente las de 2,4 GHz. Esto provoca interferencias que pueden debilitar la señal de internet justo cuando más se necesita. Los expertos coinciden en que, al encender un microondas, la señal Wifi puede sufrir cortes o una caída notable de velocidad, sobre todo si el router se encuentra muy cerca de la cocina o en una zona abierta donde ambos dispositivos comparten espacio. El problema se agrava si además hay otros dispositivos electrónicos como televisores, altavoces Bluetooth o teléfonos inalámbricos en la misma zona. El WiFi funciona mediante ondas de …