Stellantis, uno de los gigantes automotrices más importantes del mundo, enfrenta un cambio inesperado en su liderazgo. Carlos Tavares, quien había estado al frente de la empresa desde su fundación en 2021, presentó su renuncia como CEO con efecto inmediato.

El anuncio, confirmado por el consejo de administración bajo la presidencia de John Elkann, marca un momento crítico para la compañía, que ahora deberá operar sin un CEO permanente hasta el primer semestre de 2025, acorde con información proporcionada por la compañía.

El futuro de la dirección de Stellantis estará en manos de un comité ejecutivo interino encabezado por Elkann. Mientras tanto, un comité especial del directorio ya trabaja en el proceso de selección del nuevo CEO.

Según el fabricante de autómoviles este periodo de transición no altera las previsiones financieras para 2024, confirmadas el pasado octubre. La compañía ya había advertido en septiembre sobre posibles presiones debido a problemas en la cadena de suministro y una competencia cada vez más fuerte de fabricantes chinos.

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Carlos Tavares deja un legado complejo en Stellantis, que en solo tres años logró consolidarse como el cuarto mayor fabricante de automóviles del mundo, detrás de Toyota, Volkswagen y Hyundai. Sin embargo, la gestión de Tavares no estuvo exenta de desafíos como cuando dijo que no había espacio para la indulgencia si alguna de sus marcas no lograba generar ganancias. "Si no ganan dinero, los cerraremos", …