Si eres conductor, tienes muchas papeletas para terminar cayendo en una nueva modalidad de timo en la que los estafadores buscan suplantar a una compañía de seguros. Hablamos de la 'estafa del retrovisor roto'.

Para llevar a cabo esta estafa, los delincuentes dañan intencionadamente el espejo retrovisor de un vehículo y dejan una nota en el parabrisas con un mensaje que suele decir, sencillamente

"Te he roto el espejo, lo siento. Llama a este número:... ".

Este mensaje, aparentemente de disculpa, no hace sino invitar al conductor a ponerse en contacto con el supuesto responsable para solucionar el problema a través de la aseguradora. Pero, cuando la víctima llama al número proporcionado, el estafador procede a solicitar datos personales...

...o bien invita a la víctima a acceder a un enlace de WhatsApp que supuestamente lo pone en contacto con un chat de atención de una compañía aseguradora (donde, igualmente, le pedirán sus datos personales y bancarios).

Y, además de estas variantes digitales de la estafa, existen otras más directas y presenciales: en algunos casos, los delincuentes se presentan para culpar a la víctima del incidente, exigiendo una compensación inmediata y en efectivo, recurriendo a la presión (e incluso a las amenazas) para que la víctima no tenga tiempo de pensar y termine pagando una suma considerable de dinero.

En Genbeta

Estafa DGT: el cobro de la falsa multa y otros timos habituales que la suplantan

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