“Nadie se despertará mañana decepcionado porque no ocurrió nada”.
Por alguna razón que no llegamos a comprender, en los títulos de “The Most Powerful Man in the World (and His Identical Twin Brother)”, séptimo episodio de la tercera temporada de The Leftovers, han recuperado el tema de la banda sonora que compuso Max Richter como melodía principal, es decir, no se han servido de ninguna canción como hasta ahora que apuntale la idea básica del capítulo. Seguidamente, una muy adecuada conversación de Kevin Garvey Jr. (Justin Theroux) y Nora Durst (Carrie Coon) sobre deseos ante la muerte, en la que se nos revela un detallito de importancia referencial como por qué Kevin se dejó crecer esa barba mesiánica que tiene.
En cuanto escuchamos los compases de Nabucco, sabemos que nos dirigimos de cabeza a otra flamante y turbadora enajenaciónY vamos al grano: parece que Kevin ha accedido a correr el riesgo y llevar a cabo la absoluta locura que su padre (Scott Glenn) y compañía le habían propuesto para evitar el fin del mundo. Y en cuanto el espectador más entusiasta de la serie escucha los ya sabidos compases del tercer acto de Nabucco, la tragedia lírica que Giuseppe Verdi estrenó en 1842, sonríe de gozo porque sabe nos dirigimos de cabeza a una flamante y turbadora enajenación como la que nos llegó a hipnotizar durante “International Assassin” (2x08). Porque esto, señoras y caballeros, es lo que estábamos esperando con cierta ansiedad, ya que no por nada la temporada dos fue …