Sonreír puede parecer un gesto simple, pero la ciencia ha demostrado que su impacto es profundo. Más allá de ser una reacción a la felicidad, sonreír puede influir en nuestro estado de ánimo, mejorar la percepción que otros tienen de nosotros y hasta hacer que quienes nos rodean se sientan mejor. Descubre tres razones psicológicas por las que deberías sonreír hoy, incluso si no tienes ganas.