Un arqueólogo del Museo de Odense en Dinamarca encontró algo que ha dejado a muchos sorprendidos. Mientras investigaba una colina aparentemente común, halló restos humanos y armas de más de 4.000 años de antigüedad. Aunque el cuerpo ya no está completo, los objetos que lo acompañaban han dado nuevas pistas sobre la vida y la sociedad neolítica.