Hoy por hoy reconocemos a Apple como una de las compañías referentes en el mundo tech. Esto a pesar de sus detractores. No obstante, para la década de los 80 lanzó un producto cuyo fracaso fue tan grande que la propia empresa decidió enterrar 7,000 de esas unidades.
Esta es la premisa de la historia de Bob Cook, quien compró 7,000 equipos Lisa pertenecientes a Apple con la idea de modificarlos y revenderlos. Para su mala fortuna, antes de que pudiera llevar a cabo su plan la compañía los recuperó, destruyó y puso bajo tierra en un vertedero.
El fracaso de Lisa. Era el año de 1983 cuando Apple sacó al mercado una de las primeras computadoras personales con una interfaz gráfica de usuario. Aunque la propuesta sonó innovadora, el producto fracasó debido a su elevado precio de 10,000 dólares y varios inconvenientes técnicos.
Además, la Apple Lisa enfrentó una feroz competencia: la Macintosh. Con un precio mucho más accesible de 2,500 dólares, y las computadoras de IBM, el éxito de Lisa se vio truncado. Como resultado, solo alcanzó a vender 30,000 equipos.
Mente de tiburón. Finalmente, apenas dos años después de su lanzamiento, Apple decidió descontinuar el proyecto. Esta decisión dejó un excedente de 7,000 computadoras en su inventario. Aunque el plan no era venderlas, ofrecieron a Bob Cook la oportunidad de comprarlas.
Inicialmente, Cook buscó convertirse en distribuidor de los nuevos productos de …