El ser humano siempre ha tratado de inventar nuevos productos que cubran con las necesidades de las personas. No especialmente raro ver cómo algunos productos fueron ideados para una cosa, y finalmente tuvieron otros usos. El caso más famoso es el de la viagra, un medicamento que en sus inicios tenía pensado servir para tratar dolencias del corazón. Algunos productos del pasado llevaban ciertas cantidades de radiación, de hecho, hoy en día nuestros móviles tienen niveles de radiación e incluso el iPhone 12 se retiró de Francia por ello.Hoy vamos a hablar de un hombre que bebió el compuesto que le da nombre al término radiación, el radio. La historia no terminó nada bien para él, ya que su cuerpo empezó a descomponerse de formas realmente sorprendentes.Un tónico milagroso que le causó una terrorífica muerteEn los siglos XIX y XX se empezó a llevar a cabo un fenómeno masivo de venta ambulante de productos mágicos. Crecepelos milagrosos y tónicos que "recuperaban la virilidad de los hombres". Algo que se puede ver también en los periódicos de la época. Así, uno de los vendedores de estos tónicos milagrosos era Eben Byers, un empresario que había creado el Radithor, un tónico compuesto fundamentalmente por radio tal y como cuentan en Science Alert.Desafortunadamente, el tónico llevaba unas cantidades de radio increíbles, pero él estaba seguro de que serviría para curar muchas enfermedades, así que para venderlo estuvo demostrando cómo lo bebía sin sufrir riesgos. Para el año 1930 estaba terriblemente enfermo y ya …