De Steve Jobs se han contado muchas cosas. En ocasiones hemos conocido anécdotas de su vida cotidiana en la oficina o cómo llevaba siempre un uniforme. O aquellos días donde pasaba tanta hambre que intercambiaba botellas de cristal por comida. Pero nunca sobre cómo el fundador de Apple se la jugaba a su propia compañía a la hora de pagar por su almuerzo y el de otros compañeros de trabajo.
Y, a decir verdad, este era truco muy simple a la hora de pagar en las cafeterías y restaurantes del antiguo campus de 1 Infinite Loop, ahora centralizados dentro del Apple Park.
Steve Jobs invitaba pero tenía un plan distinto
Tal y como relata la hemeroteca, hay una anécdota muy interesante. La contó Scott Forstall para Wired hace unos cuantos años y la recupera John Gruber en su Daring Fireball. Y dice así:
Cuando comía con Steve Jobs, él insistía en invitarme, lo cual siempre pensé que era un poco raro. Incluso si íbamos juntos y él pedía algo rápido y ya hecho como sushi y yo pedía una pizza que hacían en el horno de leña, me esperaba en la caja durante 10 o 15 minutos. Me sentía muy incómodo.
Al final, le dije: "De verdad, puedo pagarlo yo mismo, así que por favor no te quedes ahí esperándome". Y me dijo, "Scott, no lo entiendes. ¿Sabes que para pagar debemos pasar nuestra tarjeta de empleado y que eso se deduce del salario? …