El agua es considerada como la principal fuente de vida en nuestro planeta, ya que forma parte de todo organismo en mayor o menor medida. De hecho, las fuentes más antiguas de agua conservan microorganismos que no se encuentran en otras aguas, lo que le proporciona un sabor único. Ese fue el descubrimiento de una geóloga, que no dudó en probar esta agua para descubrir a qué sabe y plasmarlo en su estudio.El sabor del agua precámbicaEsta agua fue encontrada por la geóloga Barbara Sherwood, quien, investigando una cavidad rocosa, encontró un pequeño depósito de agua que, según la antigüedad de esa formación, implica que esa agua llevaba ahí 2.600 millones de años, recogiendo propiedades de los minerales y desechos de su alrededor. Sin embargo, eso no puso freno a la geóloga a la hora de realizar un examen gustativo a dicha agua. Como es lógico, no era de un sabor agradable, sino "muy salado y amargo", incluso más que el agua del mar.Después de ese primer análisis gustativo, se realizaron pertinentes pruebas y análisis en laboratorios para determinar la composición de esta agua, algo que fue publicado en la revista Nature y que mostró la presencia de elementos que, 2.600 millones de años atrás, tenían una mayor presencia en el entorno, con gases como el xenón, el neón y el argón, ahora de presencia residual en nuestra atmósfera. Se estima que la Tierra tiene unos 4.600 millones de años, por lo que esta agua procede de cuando el planeta …