“La capacidad de realizar tareas prácticas básicas se está perdiendo entre las generaciones más jóvenes”. Parece que el chiste "¿Cuántos [inserte sector poblacional del cual se quiere hacer una broma] se necesitan para cambiar una bombilla?" se ha vuelto realidad. Y en este caso, se necesitan varios Gen Z para hacerlo.
Tal como advirtió Andy Turbefield, minorista de artículos de automoción y ciclismo británico, los jóvenes adultos han encontrado un nuevo enemigo en sus vidas: las tareas cotidianas. De acuerdo con una encuesta realizada por la compañía Halfords, al menos un 25% no sabe cómo cambiar un foco.
"Muchos se muestran reacios a asumir incluso las tareas más básicas". Las palabras de Turbefield, respaldadas por los datos de la encuesta, evidenciaron cómo los jóvenes pierden gradualmente tanto el interés como las habilidades necesarias para realizar ciertas actividades. Especialmente cuando se trata de lo que algunos llaman "hacer talacha".
De las 2,000 personas encuestadas, se reveló que la generación más joven muestra una falta de conocimientos básicos para realizar tareas por sí mismos. Menos de dos tercios admitieron sentirse seguros al limpiar un automóvil, y prefieren que sus padres lo hagan. Además, uno de cada cinco confesó que contrataría a un profesional para algo tan sencillo como cambiar una bombilla en el techo.
"Demasiado inseguro". Pero, ¿por qué cambiar un foco les resulta algo complicado? Según revelaron, no sólo no saben cómo llevarlo a cabo, sino, que les resulta "peligroso" el hecho …