Los gestores de contraseñas llevan acompañándonos tres décadas. Tanto es así que esta útil función se ha implementado en los navegadores y, si hay un navegador popular, ese es Chrome. Así que, querido lector o lectora, pueden cumplirse dos premisas: que nos estés leyendo desde Google Chrome y que guardes tus contraseñas en este navegador. Si es el caso, hoy te invitamos a que cambies esta práctica, borres las contraseñas del navegador y des el salto a un gestor de contraseñas por varios motivos.
Lo primero de todo, hay que tener en cuenta que los gestores de contraseñas integrados en el navegador lógicamente han evolucionado a lo largo de los años y hoy, si quieres acceder a ellas para visualizarlas, editarlas o exportarlas, tendrás que introducir tu contraseña antes pero, ¿han mejorado tanto como para ser la mejor opción frente a un gestor de contraseñas específico? Respuesta corta: no.
Vaya por delante una obviedad: para una empresa que desarrolla un gestor de contraseñas, la seguridad y la confianza no solo son valores importantes, si no que son condición sine qua non. Así, lo ideal es aplicar técnicas de conocimiento cero en la protección de tus datos cifrados para que nadie, ni la propia empresa o una entidad gubernamental puedan acceder a tus contraseñas. Pero nada es perfecto y a veces los errores y accidentes pasan: es el caso de LastPass y el robo de las contraseñas de sus clientes hace unos meses. Con LastPass además conocimos que más allá del …