Se convirtió en un fenómeno en apenas una semana: Vero llegaba como la nueva red social que desbancaría a Facebook e Instagram, fusionando todas las características favoritas de los usuarios en una sola interfaz. Aunque se creó en 2015 (con la misma versión beta que aún hoy se puede descargar y que antes era de pago), una potente campaña de publicidad consiguió ponerla en el punto de mira bajo el eslogan «True social» (algo así como «verdaderamente social»). De 150.000 descargas en dos años, pasó a 3 millones en una semana, subiendo a los primeros puestos de las listas en las principales plataformas de aplicaciones. Después de la fiebre y los fuegos artificiales, parece que la moda está perdiendo fuelle, ya que actualmente ha caído hasta el número 83 de aplicaciones más descargadas en la plataforma Google Play y ha desaparecido de los 100 primeros puestos en App Store para iOS. Pero, ¿qué ha ocurrido en apenas unos días?
Esta red social fue acogida por los «cosplayers» (personas que recrean los atuendos de sus superhéroes favoritos o de personajes de manga japonés) porque ofrecía la oportunidad de hacer zoom en sus fotografías de una manera más sencilla que, por ejemplo, Instagram. De ahí pasó a artistas del maquillaje, tatuadores y «skaters». Esta plataforma permite compartir fotos, enlaces, ubicaciones o recomendar películas, libros o música. También tiene la opción de seguir a otros usuarios y filtrarlos por categorías, lo que hace posible una criba en la información que llega de forma …