Esta mañana saltaron las alarmas en Telefónica y otras empresas a escala mundial porque un virus informático había atacado sus ordenadores. El culpable, una versión ransomware WannaCry que a cambio de liberar los sistemas pedía un rescate en bitcoins.
El ransomware es una técnica que utilizan los hackers para bloquear los dispositivos y exigir un rescate a cambio de que el usuario recupere el acceso. Este «secuestro informático» funciona de la siguiente manera, «coge todos los ficheros del ordenador, los cifra y pide dinero a cambio de devolverlos», como señalan fuentes consultadas por ABC.
En este caso, WannaCry tiene una particularidad. Solo hace falta que uno de sus archivos llegue al ordenador o la red para secuestrar por completo el sistema. Una vez el virus se libera, se extiende por el resto de los equipos Windows en determinadas condiciones. No necesita una mano humana que le guíe. Por tanto, la vía de entrada de este malware bien podría haber sido un archivo ejecutable en un email.
Una vez cifrados los archivos, bloquea el acceso a todas las carpetas y deja un documento de texto en el que da instrucciones al usuario sobre como puede recuperar los sistemas. El mismo documento dirigido a Telefónica en el que el secuestrado exige unos 300 bitcoins por liberar todos los equipos, más de medio millón de euros.
Otra de las particularidades de este malware es el tipo de ataque. Este tipo de cibersecuestros ocurren bastante a menudo, pero este tipo de infección a gran …