«Arena of Valor», «Fantasy Westward Journey», «Monster Strike», «Clash Royale» y «Clash of Clans» fueron el pasado año los videojuegos móviles más exitosos del mundo. Un mercado en expansión que generó en 2017 más de 59.000 millones de dólares. Todo un negocio que ningún fabricante de productos tecnológicos quiere pasar por alto. Tampoco los teléfonos móviles inteligentes, que poco a poco empiezan a ofrecer modelos pensados, precisamente, para consumir estas exigentes aplicaciones.
Tras el Razer Phone, Xiaomi pretende entrar en este embrionario segmento de mercado. Para ello, prepara el lanzamiento de una nueva línea de negocio, The Black Shark, según los rumores surgidos a raíz de un informe del gobierno chino en el que destacan las intenciones de los fabricantes locales de introducir un dispositivo de altas prestaciones con un «sistema de refrigeración aeronáutico», aunque sin concretar de qué tecnología se trata.
Con ello, Xiaomi, el cuarto mayor fabricante de teléfonos en estos momentos, aspira a ampliar su catálogo de productos, dado que no solo vende dispositivos electrónicos, sino también utensilios de cocina y accesorios para baño. Los primeros indicios apuntan a un «smartphone» con un procesador de alta gama y un apartado gráfico equipado con un DSP, un procesador de señal digital. Se trata de un sistema pensado para optimizar aplicaciones que requieran operaciones numéricas a muy alta velocidad. Es decir, los juegos móviles.
En caso que finalmente se ponga a la venta, el fabricante asiático deberá atraer al público a través de su tradicional estrategia de precios …