Durante siglos, las pirámides de Egipto han sido un misterio que ha dejado perplejos a arqueólogos e historiadores. Gigantescas, imponentes y casi imposibles de replicar con las herramientas de la época. ¿Rampas interminables y esclavos exhaustos? Puede que no. Un reciente estudio plantea una teoría sorprendente: los antiguos egipcios podrían haber utilizado un ingenioso sistema hidráulico para levantar sus monumentales estructuras. ¿Podría el agua haber sido la clave detrás de estos colosos de piedra?